The shape of extremely metal-poor galaxies
Autor
Putko, Joseph HenryFecha
2018Resumen
Las galaxias extremadamente pobres en metales (XMPs) normalmente se definen
como aquellas que tienen una metalicidad del gas ionizado inferior a una décima
parte del valor de la metalicidad solar. Se cree que las galaxias XMPs deben de ser
los tipos de galaxias más comunes en el Universo local, aunque generalmente no son
detectadas a no ser que se encuentren en la fase “starburst.” Las galaxias XMPs
starburst tienden a ser muy explosivas; la morfología típica es “cometaria” o “tadpole”,
en la que el starburst es notablemente asimétrico y el componente subyacente
(es decir, toda la galaxia salvo el starburst) es alargada. Solo hay unos cientos de
galaxias XMPs con starburst, y la mayoría de ellas han sido descubiertas a partir
del estudio del catálogo espectroscópico del Sloan Digital Sky Survey (SDSS).
Estas XMPs starburst tienen gran interés astrofísico. Primero, porque se han
descubierto grandes inhomogeneidades en la distribución de su metalicidad. Como
la escala de tiempos de la mezcla de gases en el disco de una galaxia es corta, el
gas pobre en metales que desencadena el starburst tiene que haber sido acretado
recientemente. Las simulaciones cosmológicas predicen que los discos de las galaxias
son alimentados por la acreción de gas desde la red cósmica, y que este gas externo
es quien mantiene la formación estelar en el tiempo. Este escenario de acreción de
gas frío de origen cosmológico explicaría las caídas de metalicidad en las XMPs.
Debido a que la formación estelar activa de las XMPs parece que es debida a la incorporación de gas pobre en metales, las XMPs proporcionan una de las mejores
evidencias observacionales disponibles de materia del medio intergaláctico sobre las
galaxias en formación. En términos generales, las XMPs son de particular interés
debido a que parecen ser galaxias de disco en sus etapas de formación tempranas, y
son las mejores análogas en el Universo local de la primera generación de galaxias
de baja masa. Por tanto, entender este tipo de galaxias puede ser de gran ayuda a
la hora de comprender la formación y evolución de las galaxias.
El escenario de acreción de “cold-flow accretion” en cual el gas acretado directamente
desde la red cósmica estimula la formación de galaxias de disco es una
predicción robusta de los modelos cosmológicos aunque, desafortunadamente, cuenta
con muy poca evidencia observacional. Como explicamos en el párrafo anterior, la
caída de metalicidad en las regiones de formación estelar de las XMPs proporciona
la mejor evidencia observacional disponible de las predicciones de los modelos, cosmológicos,
pero es una evidencia primaria de la acreción de gas desde la red cósmica
y no explica la estructura de las XMPs. La estructura de las XMPs no ha sido
estudiada hasta el momento, aunque la galaxia subyacente tiene que ser una galaxia
de disco para ajustarse las predicciones de los modelos. Hasta la fecha, en el único
estudio que ha abordado la estructura de las XMPs de manera directa demostramos
que estas galaxias tienen perfiles de luz exponenciales, como es de esperar en las
galaxias de disco. El objetivo de este trabajo es caracterizar observacionalmente la
forma tridimensional de la galaxias XMP a través de la medida del cociente entre los
ejes mayor y menor medido en un conjunto grande de XMPs. Este enfoque revelará
el grosor intrínseco de las galaxias y en qué grado son oblata, prolata o triaxial.
Se define la relación axial como el cociente entre la proyección del eje menor
y la proyección del eje mayor. El método de la relación axial requiere medir la
relación axial de un número estadísticamente significativo de galaxias, y posteriormente
construir un histograma con la distribución de relaciones axiales observadas.
Este histograma se puede modelar como una colección de elipsoides con orientación
aleatoria con respecto al observador, cuyas propiedades se pueden inferir realizando ajustes a la distribución observada. Un elipsoide oblato tiene dos ejes de igual longitud
y un tercer eje más corto. A dicha morfología le corresponde una distribución
de la relación axial plana y tendiendo a la unidad. El elipsoide prolato también
tiene dos ejes de la misma longitud, pero el tercer eje es más largo que en el caso
anterior. A dicha morfología le corresponde una distribución de la relación axial
con un pico escarpado en el lado izquierdo del histograma (relación axial más baja).
El elipsoide triaxial, por su parte, no tiene ningún eje de igual longitud, y su distribución
de relación axial presenta dos picos. El grosor (relativo al eje mayor) se
puede deducir a partir de la caída del histograma hacia pequeñas relaciones axiales,
independientemente de la morfología intrínseca del objeto.
Las 196 fuentes de tipo XMP de Sánchez Almeida et al. (2016) fueron consideradas
en este trabajo. Dicha muestra fue seleccionada para estudiar las propiedades
de la clase XMP porque contiene la mayoría de las XMPs conocidas. Se realizaron
mediciones sobre imágenes de SDSS de la banda r (data release 12). Se redujo el
tamaño de la muestra a 171 galaxias tras inspeccionar visualmente las imágenes en
banda r, conjuntamente con las imágenes a color SDSS g-r-i. Fueron omitidas las
galaxias que parecían ser fusiones o satélites, y aquellos casos en que fuerzas de marea
podrían estar presentes, debido a que en estos tres casos las galaxias probablemente
sufren fuerzas externas que influyen en su forma. Para medir la relación axial, se
utilizó el programa SExtractor ajustando una elipse a cada XMP y utilizando un
umbral de fondo, para que pudiera ser considerada aquella señal más externa de las
XMPs que se encontraba razonablemente por encima del ruido de fondo local. Cada
elipse ajustada fue meticulosamente inspeccionada visualmente para asegurarnos de
que el procedimiento funcionaba con exactitud, usando diagramas de contorno sobre
versiones suavizadas de las imágenes como control.
El autor de este trabajo realizó comprobaciones en las medidas de relación
axial variando el umbral de fondo utilizado para ajustar las elipses, repitiendo las
medidas en la banda i de SDSS y comparando los resultados de SExtractor con las
relaciones axiales medidas por las herramientas (pipelines) de reducción de SDSS. Además, el error en las relaciones axiales se cuantificó teniendo en cuenta el seeing
y tamaño de las galaxias. Sólo una de todas las medidas realizadas posee un error
mayor de 0.12 en la relación axial, y el error medio es 0.02. Este pequeño error es
un reflejo de que las XMPs son grandes en comparación con el seeing. El eje mayor
medio de la muestra es 16.6 arcsec y el seeing medio es 1.2 arcsec.
La distribución de relación axial de la muestra de XMPs indica que las XMPs
son morfológicamente gruesas, siendo las galaxias más pequeñas las más gruesas en
proporción a su tamaño. Sólo el 8% de los XMPs tienen relaciones axiales inferiores
a 0.4, pero estas galaxias son mucho mayores que la XMP estándar. No hay XMPs
con menos de 5 kpc en su eje mayor que tengan una relación axial inferior a 0.4. La
fuerte caída estadística en la distribución de la relación axial cerca de 0.4 sugiere
que el espesor más común de XMPs es aproximadamente 0.4 veces el eje mayor. Por
otro lado, hay una caída notable cerca de 0.5, y la existencia de múltiples caídas
en la distribución de la relación axial observada es coherente con la idea de que el
conjunto que las XMPs no comparte un espesor relativo único. Construí un modelo
de galaxia para estimar el eje menor mínimo que puede ser medido, y el resultado
de dicha simulación indica que las disminuciones en el histograma de relación axial
a baja relación axial no son causadas por efecto del seeing.
La distribución de la relación axial también indica que las XMP son principalmente
triaxiales y que un pequeño número pueden ser prolatas. La triaxialidad
se infiere de la escasez de XMPs a alta relación axial, y de que el brillo superficial
no disminuye con el aumento de la relación axial, ya que si la escasez fuese debida
a un sesgo observacional el brillo superficial debería disminuir conforme aumenta la
relación axial. Es importante destacar que la escasez de XMPs observadas a una
alta relación axial no se debe a un efecto de selección en función del brillo superficial,
ya que el 99% de las XMPs tienen brillo por encima del nivel de completitud
espectroscópica del SDSS (90%).
La explicación más probable propuesta para la triaxialidad observada y el
espesor de las XMPs es que son galaxias en proceso de formación, esto es, se cree que la energía transportada por la caída de gas y la liberación de la energía cinética
producida por la formación estelar producen un potencial gravitacional triaxial. Se
cree también que ésta es una característica transitoria, porque las galaxias tienden
a ser axi-symetricas cuando las fuerzas externas de ser importantes.
En el futuro queremos ajustar la distribución de la relación axial observada
para cuantificar el grado de triaxialidad de la clase de galaxia XMP. Debido a que
se observa que el grosor relativo varía con el tamaño de la galaxia y la distribución
de la relación axial muestra múltiples caídas, la clase XMP debe ser separada en
subconjuntos para que podamos hacer en el futuro un ajuste aún más preciso. Las
medidas de la relación axial corregida por PSF, particularmente para las XMP
más pequeñas, también facilitarían ajustar con mayor precisión la relación axial
observada, haciendo posible cuantificar mejor el grado de triaxialidad de las XMPs.