Internet ha marcado un antes y un
después en nuestra forma de interpretar e interactuar con el mundo, trayendo consigo una nueva percepción
del mismo, que ahora se constituye
en base a dos realidades: la física y la
virtual. Esta segunda, está determinada por una inmediatez e interactividad
instantánea que desafía al tiempo físico, dando lugar a un tiempo universal
que no conoce límites. A través de la
pintura, se pretende cuestionar y visibilizar algunas de las conductas y prácticas que devienen de la saturación y la
adicción a la información banal y fugaz.