Relación entre escalas de predicción de riesgo quirúrgico y escalas de fragilidad con resultados negativos geriátricos en pacientes ancianos sometidos a cirugía cardíaca
Fecha
2021Resumen
La fragilidad puede ser útil para la estimación del riesgo quirúrgico en
pacientes de edad avanzada candidatos a cirugía cardíaca, aunque se
desconoce la mejor manera de estimar dicha relación en la clínica.
Nuestros objetivos son estudiar la relación de diferentes escalas de riesgo y
fragilidad con la aparición de eventos adversos geriátricos, evaluar su
aplicabilidad, valorar qué escala de fragilidad predice mejor el desarrollo de
resultados negativos y evaluar la evolución de la calidad de vida y del estado
funcional de los pacientes ancianos intervenidos de cirugía cardíaca.
MATERIAL Y MÉTODOS
Se realizó un estudio observacional prospectivo multicéntrico para pacientes
de 70 años o más sometidos a cirugía cardíaca con circulación extracorporea.
La fragilidad fue evaluada por medio de los criterios fenotípicos de Fried, la
escala FRAIL y la Clinical Frailty Scale (CFS). El riesgo quirúrgico se midió con
EuroSCORE original, EuroSCORE II y STS Score.
Los pacientes fueron evaluados previamente a la cirugía, al alta y después
de los 6 meses, estimándose la capacidad funcional, la calidad de vida, la
mortalidad, el delirio, el uso de los recursos sanitarios y sociales y la satisfacción
con los resultados de la intervención.
RESULTADOS
Se incluyeron 137 pacientes. Una mayor fragilidad cuantificada con la CFS
se relacionó con más visitas a urgencias, más mortalidad, mayor pérdida
funcional y mayor prevalencia de delirio, así como menor satisfacción con los
resultados.
XIV
Un mayor riesgo quirúrgico con EuroSCORE II se relacionó con una mayor
mortalidad, más reingresos hospitalarios, institucionalización y necesidad de
implementación de ayuda domiciliaria.
A pesar de que, en general, los pacientes no mejoraron su capacidad
funcional, apenas el 11% expresaron deterioro en la calidad de vida y el 83,5%
expresaron satisfacción con los resultados de la cirugía.
CONCLUSIONES
Las escalas de fragilidad son aplicables en la práctica cardioquirúrgica
habitual. La CFS puede ser una buena herramienta para predecir los resultados
negativos para la salud en ancianos candidatos a cirugía cardíaca. La percepción
de la calidad de vida postoperatoria no se relaciona con el estado funcional
evolutivo. La calidad de vida tiende a mejorar en los pacientes ancianos
intervenidos. Frailty may be useful for estimating surgical risk in elderly patients who are
candidates for cardiac surgery, although the best way to quantify it in the clinic is
unknown.
Our objectives are to study the relationship of different scales of risk and frailty
with the occurrence of geriatric adverse events, evaluate their applicability,
assess which scale of frailty best predicts the development of negative results
and evaluate the evolution of the quality of life and functional status of elderly
patients undergoing cardiac surgery.
MATERIAL AND METHODS
A prospective multicenter observational study was conducted for patients
aged 70 years or older undergoing cardiac surgery with extracorporeal
circulation. Frailty was assessed using Fried's phenotypic criteria, the FRAIL
scale and the Clinical Frailty Scale (CFS). Surgical risk was measured with
original EuroSCORE, EuroSCORE II and STS Score.
Patients were evaluated before surgery, at the moment of discharge and after
6 months, measuring functional capacity, quality of life, mortality, delirium, use of
health and social resources, and satisfaction with the results of the intervention.
RESULTS
We included 137 patients. A higher frailty quantified with CFS was associated
with more emergency room visits, more mortality, greater functional loss, and
higher prevalence of delirium, as well as lower satisfaction with the results.
A higher surgical risk with EuroSCORE II was related to higher mortality, more
hospital readmissions, institutionalization, and the need for in-home help
implementation.
Although, in general, patients did not improve their functional capacity, only
11% expressed deterioration in quality of life, and 83.5% expressed satisfaction
with the results of surgery.
CONCLUSIONS
Frailty scales are applicable in usual cardiosurgical practice. CFS can be a
good tool for assessing negative health outcomes in older candidates for cardiac
surgery. The perception of postoperative quality of life is not related to the
functional state at follow up. The quality of life tends to improve in the elderly
patients who have undergone surgery.