Evaluación de una escala de medición del duelo complicado desde el Trabajo Social.

Abstract

El duelo complicado es un fenómeno que afecta entre un 10% y un 15% de la población (Fernández-Alcántara et al., 2014), por lo que, poder detectarlo y prevenir su aparición es fundamental para la calidad de vida. El objetivo del presente estudio es determinar la utilidad de una escala de detección del duelo complicado de elaboración propia. Dicha escala detecta el riesgo de duelo complicado a raíz de la pérdida o detecta el riesgo existente previo a la pérdida según las puntuaciones en factores de riesgo, en base a los Factores de protección y factores de riesgo de padecer duelo complicado existentes y teorizados por diversos autores: Melliar-Smith, (2002), Twycross, (2003), Ellifit, Nelson y Walsh, (2003), Stroebe et al (2006), Barreto, Yi y Soler, (2008), Barreto, De la Torre y Pérez-Martín, (2012). Para ello, se administra una escala de 19 ítems que contempla 5 factores: factores personales y relativos al vínculo (con la persona fallecida); características de la enfermedad o la muerte; aspectos relacionales (relaciones entre amistades y familia) y duelos previos no resueltos o pérdidas múltiples; factores familiares; emocionales y psicológicos. Se determinó la incidencia de duelo complicado en la muestra y se compararon los resultados de la escala con las variables sociodemográficas: género, nivel de estudios, edad, edad de la persona fallecida, provincia, ser cuidador principal de la persona fallecida o no y motivo por el que se produjo el fallecimiento. Por otra parte, cabe destacar la participación de 157 sujetos. En cuanto a los resultados obtenidos se observa que los factores emocionales y psicológicos son los que más relevancia tienen en la muestra estudiada. En particular, se constata que los sujetos de la muestra puntúan alto en la pregunta relativa a cuadros de ansiedad, estrés y depresión. Además, existen diferencias entre hombres y mujeres, siendo estas últimas las más afectadas por el duelo complicado. En cuanto a los resultados totales, de los 157 individuos de la muestra 142 muestran ausencia de duelo complicado frente a 15 que muestran indicadores de duelo complicado, siendo 11 mujeres.

Complicated grief is a phenomenon that affects between 10% and 15% of the population (Fernández-Alcántara et al., 2014), so being able to detect and prevent its occurrence is essential for quality of life. The aim of this study is to determine the usefulness of a self-developed scale for detecting complicated grief. This scale detects the risk of complicated grief following the loss or detects the existing risk prior to the loss according to the scores in risk factors, based on the existing protective factors and risk factors for complicated grief theorized by various authors: Melliar-Smith, (2002), Twycross, (2003), Ellifit, Nelson and Walsh, (2003), Stroebe et al (2006), Barreto, Yi and Soler, (2008), Barreto, De la Torre and Pérez-Martín, (2012). For this purpose, a 19-item scale is administered that considers 5 factors: personal and bonding factors (with the deceased); characteristics of the illness or death; relational aspects (relationships between friends and family) and previous unresolved grief or multiple losses; family factors; emotional and psychological factors. The incidence of complicated bereavement in the sample was determined and the results of the scale were compared with the socio-demographic variables: gender, level of education, age, age of the deceased, province, being the main caregiver of the deceased or not, and the reason for the death. On the other hand, it is worth highlighting the participation of 157 subjects. The results obtained show that emotional and psychological factors are the most relevant in the sample studied. In particular, it was found that the subjects in the sample scored high on the question relating to anxiety, stress and depression. Moreover, there are differences between men and women, the latter being more affected by complicated bereavement. As for the total results, of the 157 individuals in the sample, 142 show an absence of complicated grief compared to 15 who show indicators of complicated grief, 11 of whom are women.