Programa educativo de salud sexual con perspectiva de género
Autor
Abreu Valencia, PaulaFecha
2022Resumen
La sexualidad es inherente al ser humano desde que somos niños y, por ello, debemos educar en ella
con naturalidad y respetando los ritmos de desarrollo, de forma holística y desde una perspectiva de
género que nos permita proporcionar una educación sexoafectiva eficaz abrazando la diversidad y la
inclusividad. En definitiva, nuestro objetivo es desarrollar un programa educativo de salud sexual en
la que todas y todos los adolescentes tengan cabida aportando información científica con perspectiva
de género para lograrlo. Para ello; hemos creado un estudio analítico longitudinal antes y después, un
estudio cuasi experimental en el que realizaremos una valoración de los conocimientos sobre el
binomio sexualidad y género adquiridos por los adolescentes tras el programa, evaluando a través de
ello la eficacia de nuestro proyecto.
El programa está pensado para jóvenes de entre 10 y 16 años y sus contenidos están adaptados a su
madurez y a sus inquietudes, enfocado siempre a una educación participativa y al pensamiento
reflexivo. Asimismo, también existe una sesión educativa para padres debido a que planteamos la
problemática de la falta de comunicación, la vergüenza, el miedo y los esquemas culturales dentro
del propio núcleo familiar.
Desde la enfermería; debemos combatir la desinformación a través de información científica para
evitar las conductas sexuales de riesgo en los adolescentes y, por tanto, los problemas de salud o los
embarazos no deseados. Asimismo; tenemos que contribuir a combatir los mitos sobre sexualidad y
los roles de género que permiten que las relaciones de poder entre hombres y mujeres no cambien
relegando la figura femenina a la pasividad y complacencia dentro de las relaciones sexoafectivas.
Educar en salud sexoafectiva es una prioridad en la sociedad actualmente y enfermería debe tomar el
liderazgo en prevención y promoción de salud. Sexuality is inherent to human beings since we are children. Thus, we must educate in it naturally
and respecting the rhythms of development, in a holistic way and from a gender perspective that
allows us to provide an effective sex-affective education embracing diversity and inclusivity. In short,
our goal is to develop a sexual health educational program in which all adolescents have a place,
providing scientific information with gender perspective to achieve it. For it, we have created a
longitudinal analytical study before and after, a quasi-experimental study in which we will carry out
an assessment of the knowledge about the sexuality and gender binomial acquired by adolescents
after the program, evaluating the effectiveness of our project through it.
The program is designed for young people between 10 and 16 years old and its contents are adapted
to their maturity and concerns, always focused on participatory education and reflective thinking.
Likewise, there is also an educational session for parents because we raise the problem of lack of
communication, shame, fear and cultural schemes within the family nucleus itself.
From nursing; we must combat misinformation through scientific information to avoid risky sexual
behavior in adolescents and, therefore, health problems or unwanted pregnancies. In addition; we
have to contribute to fighting the myths about sexuality and gender roles that allow power
relationships between men and women not to change, relegating the female figure to passivity and
complacency in sexual-affective relationships. Educating in sex-affective health is a priority in
society today and nursing must take the lead in prevention and health promotion.