Aspectos epidemiológicos de las conjuntivitis en nuestro medio
Author
Álvarez Marín, JorgeDate
1997Abstract
Estimación de la frecuencia de los diversos tipos de conjuntivitis en la población que acude a las Consultas de Oftalmología del Hospital Ntra. Sra. de Candelaria y el Centro de Especialidades J. A. Rumeu Hardisson. Se analiza la flora conjuntival saprófita y patógena y los antibióticos de mayor eficacia, elaborando una clasificación de las conjuntivitis y un Protocolo diagnóstico-terapéutico para las conjuntivitis. Se ha observado una afluencia de conjuntivitis con carácter estacional, predominando en los meses de Marzo-Mayo y Octubre-Noviembre. El tiempo de evolución (mediana) observado fue de 22,4 meses. Las Conjuntivitis infecciosas y las no-infecciosas se presentan con una frecuencia similar (50,24% y 44,44% respectivamente). El 5,31% fueron de tipo mixto. Las Conjuntivitis no-alérgicas (61,84%) son más frecuentes que las alérgicas (38,16%). Los tipos de conjuntivitis que se observaron con mayor frecuencia fueron la conjuntivitis bacteriana (33,82% de los casos), seguida de la conjuntivitis atópica simple (22,22%), vírica (10,14%), dermatoconjuntivitis alérgica de contacto (7,25%), irritativa (6,76%), queratoconjuntivitis de inclusión (4,35%). Tanto la flora conjuntival saprófita como la patológica predominates en nuestro medio son de tipo gram positivo, predominando Staphylococcus coagulasa negativos (69,62%) y Corynebacterium sp. (53,85%) entre los primeros, y S. aureus (40,25%) y Enterobacteriaceae (31,45%) entre las segundas. En nuestra opinión, el índice global de resistencias (22,22%) en nuestro medio es aceptable. La eficacia in vitro global fue del 77,90%, siendo superior al 90% para los antibióticos usados de forma habitual. Los aminoglucósidos demostraron una eficacia antibiótica próxima al 95%. El antibiótico de elección ante una conjuntivitis bacteriana, a la espera del antibiograma, sería la gentamicina. Recomendamos como tratamiento tópico en orden de eficacia: Gentamicina, tobramicina, cloramfenicol, trimetoprima-polimixina B, quinolonas; y como tratamiento sistémico en pacientes de alto riesgo: Cotrimoxazol, tetraciclinas, eritromicina, aminoglucósidos, vancomicina, ciprofloxacino. Sólo hemos observado 3 casos de tracoma (1,45% del total), y los 3 eran casos antiguos en estadío cicatricial, por lo que asumimos que el tracoma en nuestro medio ha sido erradicado. Entre los alergenos causantes de conjuntivitis alérgica fueron mayoritarios los ácaros (62,03% de los casos), seguidos de los pólenes (24,05%) y epitelios de animales (16,46%). En cada uno de los grupos destacó Dermatophagoides pteronyssinus y farinae, artemisia y epitelio de gato. La rentabilidad diagnóstica de algunas de las pruebas alérgicas solicitadas fue baja por lo que se debería restringir su uso basándose en los hallazgos de la historia clínica. El prick y el TPC serían las pruebas iniciales en el despistaje de los alergenos en las conjuntivitis alérgicas. El CLA y el CAP-RAST, servirían para aclarar los casos dudosos