Internet y adolescencia: influencia de los medios sociales en el comportamiento y rendimiento académico del alumnado

Abstract

The emergence of the Internet has permeated every aspect of both private and collective life. In regards to education, this technology has gotten into classrooms to the point that many teachers work with electronic devices and many students use them during lessons. But, do teenagers really need their own smartphone or tablet? Do they use them for their homework, or they are an element of distraction? Our main objective in this study is determining an appropiate age for teenagers to start using their own smartphone, as well as discovering if their parents exercise some kind of control over their usage of the Internet. In our research we have used specific tools of the social sciences, such as participant observation, desk-based research and survey. From them we could deduct that teenagers are unprotected and alone, as their parents do not usually control their online activity. In addition to that, teenagers don’t use their personal devices for academic goals, and in general the quality of education has not increased since we have the Internet in our lives and schools.

El surgimiento de Internet ha impregnado cada faceta de la vida privada y colectiva. En cuanto a educación se refiere, esta tecnología se ha inmiscuido en las aulas, hasta el punto que muchos profesores trabajan con dispositivos electrónicos y muchos alumnos los usan durante las clases. Pero, ¿realmente necesitan los adolescentes su propio smartphone o tablet? ¿Los utilizan para el desarrollo de sus tareas, o es un elemento de distracción? Nuestro objetivo principal en este estudio es determinar una edad apropiada para que los adolescentes puedan empezar a utilizar sus propios dispositivos móviles, así como descubrir si sus padres ejercen algún tipo de control sobre su uso de Internet. En nuestra investigación hemos utilizado herramientas específicas de las ciencias sociales, tales como la observación participante, investigación documental y la encuesta. De ellas hemos podido deducir que los adolescentes están solos y desprotegidos, dado que sus padres no suelen controlar su actividad online. Además de eso, los adolescentes no utilizan sus dispositivos personales para fines académicos, y en general la calidad de la educación no ha aumentado desde que tenemos a Internet en nuestras vidas y escuelas.