Este texto trata de responder a la pregunta de si las mujeres canarias se incorporaron de manera diferencial a los hombres canarios dentro de la imagen estereotipada, etnocéntrica e idealizada propia del mito de las Afortunadas, a través de las referencias a las características de las personas habitantes de las Islas Canarias que encontramos en una selección de las fuentes narrativas de los siglos XV al XVII.